Este 2013 comenzó para mi con el pie izquierdo. Siempre creo que enero y febrero son meses tranquilos, donde uno va al trabajo sin mucha gente en los colectivos, hay menos tránsito y menos trabajo y eso hace por sí mismo que uno descanse. Pero este enero fue raro, porque viajé en el colectivo tan apretada como siempre, sacaron algunas unidades, cerraron el subte A y la ciudad quedó tan caótica como estuvo todo el año: con semáforos que no andan, subtes que no andan, inundaciones y gente irritada que no se pudo tomar vacaciones.
Yo arranqué el año con un meeting de investigadores. No puedo hablar mucho de eso acá, pero les cuento que juntan muchos investigadores de diferentes países y dan entrenamientos para hacer una investigación. Esta vez me tocó ser una de las que presentaba. Detesto hablar en público, para mí es un padecimiento, me da vergüenza de que vayan a pensar los otros, de que me trabe, de pasar vergüenza, en fin mi depredador psíquico tiene una lista interminable de cosas con qué torturarme. Y además de todo la charla debía ser en inglés porque había investigadores de USA y Brasil, y no había traducción simultánea. Así que estaba aterrorizada de verdad.
La noche anterior no pude ni dormir, y mientras todos pasaban a hablar yo trataba de entender que decían y me tranquilizaba pensando que también los notaba nerviosos. Pasó un hombre de unos 35 años que era yanqui obviamente, y se veía tan nervioso que pensé, que si él hablando en su idioma podía sentirse así, yo lo tenía mas que justificado.
Cuando me tocó pasar pensé "bueno en 30 minutos esto se va a haber terminado". Apenas empecé a hablar me di cuenta que no me escuchaban bien porque el micrófono se había corrido, después de hablar un rato hablé mas tranquila y me di cuenta "Lo estoy haciendo!!". Cada vez que podía, miraba a una señora que estaba sentada en primera fila con cara de buena y una sonrisa amable que asentía a todo lo que yo estaba diciendo, así que me dediqué a mirarla a ella todo el tiempo. Después supe que era Mexicana. Y como para cerrar y que nadie me hiciera preguntas aclaré que hablaba español y portugués y que después les iba a mostrar las cosas en un stand y que me iban a poder hacer preguntas en el idioma que prefieran. Y ahí terminó. Vino un recreo en el que salimos a tomar algo y se me acercó el yanqui que había hablado un poco antes y me dijo" Very good!!". Así que me quedé tranquila y nos pusimos a hablar un rato sobre los nervios de hablar en público. Nunca sentí la garganta tan seca y la voz tan forzada.
De a poco fui bajando los decibeles, y ya para la cena estaba mucho mas tranquila, de hecho la cena es lo que mas disfruté. Me gusta poder hablar con gente de otros países y que ellos te cuenten como es su país, como ven las cosas , como ven a Argentina. Fue muy lindo, conocí gente ineteresante y muy importante pero sencilla. Me prometí a mi misma que el próximo lo iba a disfrutar mas.
Y ya me pidieron que vaya a otro y es mejor aún porque voy a conocer México. Ahora los pasajes a México son carísimos así que no creo que podría conocer México de otra forma que no sea gratis. Primero me desilusionó un poco que iba a ser en México DF y no en Cancún, pero me dijeron que México DF es hermoso y hay muchos lugares para conocer como el museo de Diego Rivera, la casa de Frida Calo y el templo del Sol y la Luna. Igual faltan unos meses... este año ya comenzó con todo!
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