Pasan los años y no importa hace cuanto no nos vemos pero nos encontramos y nos queremos como siempre y nos escuchamos pero quisiéramos hablar y no parar hasta la hora que sea. Porque si hay algo que a cualquier chica le gusta es HABLAR!!!
Conocí a mis amigas-hermanas cuando tenía ocho y nos vinimos a vivir a Buenos Aires. Vivíamos en la misma cuadra y en esa época los chicos podían jugar en la calle. Y jugábamos en la calle en las casas ý en la panadería de Dani. Esta última opción era sin duda la mas divertida y rica.
Laura, Mary y Dani, aunque no me acuerdo si estaba Mariana la primera vez que nos vimos. Me acuerdo que Daniela nos hizo el comentario de que ella hacía helado de naranja chiquitito. Muy simple: ponés jugo de naranja en la cubetera de hielo. Después incrementamos la apuesta y pusimos jugo de naranja en blister de medicamentos, y hacíamos caramelos helados...
Anoche me enteré que Laura tiene un blog y hoy fui tempranito a chusmearlo. De Laura me acuerdo que no eramos muy buenas amigas con ella, la hacíamos sufrir, llorar, pelábamos por los juguetes a veces la brujeábamos, no queríamos ordenar cuando nos íbamos. La queríamos un montón, pero honestamente no sé como nos quiere y no planeó una venganza contra nosotras al estilo malparida.
Mari era un personaje chiquitito, era coqueta como ella sola, me acuerdo que una vez se pintaron la cara con mi hermana, y tengo la imagen de acercarme y verles la capa de grasa del maquillaje brillando. No sé cuanto tiempo estuvieron para limpiarlas.
Y ya somos todas mujeres, pasaron mas de veinte años, y aunque hubo tiempo que no las ví, siempre que las veo quisiera quedarme hablando hasta la madrugada con ellas. Creo que soy una persona afortunada de tener una amistad así, de adorar a mis amigas con las que jugué con las muñecas. No compartimos mucha salida, ni joda... No! Con ellas vivimos la etapa mas inocente y linda de la vida, y después nos vimos crecer y convertirnos en adultas.
Chicas perdón que ayer me fui a las dos, es que tengo una niña que se despierta temprano. No faltará oportunidad de verlas otra vez.
Después de todo, ustedes son mis amigas-hermanas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario